martes, 7 de febrero de 2012

La guionista en la cumbre de guionistas

Por nuestra inquilinorreportera
El pasado 27 y 28 de enero, se llevó a cabo el encuentro Cumbre de Guionistas en la ciudad de México, donde participaron cuatro estadounidenses, gurús del script consulting: Syd Field, el más aclamado de todos, famoso por sus manuales que se han convertido en “biblias” para la industria del cine; Linda Seger, una acreditada consultora de guiones para cine y televisión que cuenta con exitosos libros sobre teoría del personaje y guías para mejorar un guión; Micheal Hauge, ejecutivo de Hollywood que al trabajar estrechamente con los escritores encontró un método para clarificar y canalizar con éxito las ideas del guionista;  y John Truby, consultor que toma una postura severamente crítica a los manuales para escritores aficionados y cuyo libro, Anatomía del guión se ha convertido en un best seller que ofrece un eficaz sistema para desarrollar una historia.

Pero ¿qué es un script consulting? Este término es poco usual en países donde la industria cinematográfica está aún esforzándose por existir. Pero para Hollywood el script consulting es ya un oficio que goza de alta reputación, pieza indispensable para su fábrica de ficciones. Un script consultant no sólo es el cirujano del guión con potencial, orientador del escritor extraviado en la subjetividad de las ideas; es también el responsable de estimular la creación de grandes historias, las que garantizan impacto comercial, las que muy probablemente marcarán el imaginario colectivo de los consumidores en las salas de cine a nivel mundial.
Estos nuevos personajes del medio viven bajo un halo de fama y prestigio. En su vida, no sólo se dedican a leer, tachonear, elegir o tirar guiones a la basura, sino que también viven como estrellas. Sus métodos para la escritura son un producto en sí; su nombre es ya marca. 
Libros, páginas web y softwares que facilitan el proceso creativo de la escritura de guión son productos comerciales que ellos mismos promocionan en sus también comerciales charlas de auditorio y donde muchos fans llegan a tomarse la foto y pedir el autógrafo en sus libros.
Aristóteles sin duda sería uno de estos gurús. Shakespeare y Sófocles estarían tomándose la foto, o rogándole leyera uno de sus guiones con la esperanza de verlo algún día en pantalla. Sin embargo, cabe especificar, que ni Aristóteles, ni Sófocles, ni Shakespeare fueron contemporáneos.
Aristóteles, a diferencia de estos gurús del comercio fílmico, basó su célebre poética en el análisis del drama clásico griego, donde maravillado por su perfección lo diseccionó para asentarlo como paradigma de la más alta literatura dramática; y esto lo hizo casi un siglo después de la muerte de Sófocles. 
O sea que ni Sófocles, ni Esquilo, ni Eurípides, pilares de la composición dramática occidental, necesitaron de un script consultant.
Las reglas de la composición dramática, pertenecen al contexto en el que se desarrollan, al rito social y a la sensibilidad del autor para narrar y ordenar en el tiempo y el espacio un conflicto dramático que involucra y conmueve a una comunidad específica.
Así que el término script consulting es totalmente actual; y le pertenece a una industria que busca productos consumibles que generen ganancias comerciales.
Un script consultant se concentra en hallar y encaminar tendencias, elaborar fórmulas y sistemas para crear historias eficaces; la originalidad depende del escritor; su naturaleza, por lo tanto, no está en un análisis poético, sino en su capacidad de generar herramientas aplicables en lo inmediato que generen resultados exitosos para el cine y la televisión.
Esto es lo que sin duda atrajo a varios escritores a esta llamada Cumbre de Guionistas, la necesidad de hallar un arsenal de técnicas maleables para usar en nuestro oficio; sin dejar de lado, claro está, la búsqueda personal por la originalidad y la profundidad de las ideas.  
Así que siguiendo con la analogía, claro que podemos imaginar a Shakespeare y sus colegas, así como a Calderón y todo su Siglo de Oro, rompiéndose la cabeza, intentando encontrar alguna fórmula para lograr darle la intensidad dramática a sus historias. Pero afortunadamente, los relatos y su composición se transforman según la imaginación y los hallazgos tecnológicos del momento histórico.
Las reglas del gurú Aristóteles, por ejemplo, el tiempo lineal, la sola locación y la única trama, los aventureros autores renacentistas y barrocos se las pasaron por el arco del triunfo, y quedándose sólo con la esencia heredada del drama clásico, lo extremaron a la multiplicidad de tramas, a la variación de locaciones y a las exóticas elipsis donde todo fue posible. Y ninguno de ellos contó con un script consultant.
Por eso me asusté cuando uno de los gurús invitados, John Turby, inició su charla diciendo que la estructura en tres actos (principio, desarrollo y desenlace) es para principiantes y que ésta la usó sólo el teatro y sus telones. ¡Cómo!, si el teatro en términos de composición dramática ha explorado -y sigue haciéndolo- distintas coyunturas de estructura y percepción; y, por otra parte, el mismo Jean Claude Carrière sostiene la regla clásica del principio, desarrollo y desenlace no como una división en tres, sino como la regla vital y natural que tácitamente habita el relato.
Me tranquilicé cuando comprendí que era una forma de defender su postura radical contra la simplificación de la estructura narrativa dada en los manuales de sus compañeros de podio, y que lo dijo soberbiamente con la intención de abrirse camino como un renovador de la enseñanza de la escritura de guión. Cosa que, a mi gusto, no hizo tan mal, ya que más allá de su forma de venderse mostró otros niveles de conocimiento del cuerpo de una historia.
“Yo creo en las estructuras profundas y la premisa como clave de una gran historia; la técnica de la estructura en 3 actos dividida en el tiempo de duración de la película es un mito”.
Pero antes de él, habló Linda Seger, que se concentró en tres principios que para ella generan la buena escritura: 
"La propia voz, el oficio y la creatividad".  
A Truby le siguió Syd Field quien básicamente se concentró en el setting-up (establecimiento) de la historia durante los primeros 10 minutos de película. Y el último, Micheal Hauge, sorprendió cuando al iniciar su charla honesto y al grano dijo algo así como: 
“Mi prejuicio es Hollywood, yo soy mainstream, esa es mi tendencia, y hablaré en absolutos y daré etiquetas porque es mi trabajo, porque lo requiero así para poder crear métodos aplicables; ya después ustedes los rompen y harán con esto lo que más les convenga”. 
Para Hauge la clave del guión está en crear una experiencia emocional, para ello se centró en una estructura basada en la trayectoria del héroe pero también en el movimiento del personaje al confrontar su identidad con su esencia.
Poco faltó para que los casi 400 guionistas sentados en el auditorio,  nos levantáramos con los brazos arriba a alabar las verdades del guionismo.
Exagerando, podría compararse a una convención de autoayuda y superación con todo y sus momentos de cursilería
Pero la culpa no fue nuestra, estos cuatro gurús no sólo llegan con sus sistemas de enseñanza bajo el brazo, también son grandes oradores, y buscan hacer de sus charlas un evento, con un pitch contundente, un teaser bien preparado y un cierre siempre motivacional.
A continuación hago un resumen tomado de mis notas, que muy seguramente se encuentren ya filtradas, simplificadas e interpretadas, pero en las que intento las ideas clave de cada uno de los consultores invitados. Espero les sean útiles.

Linda Seger
El proceso creativo.
Después de echar varias anécdotas de sus viajes y situaciones personales que la llevaron a realizar ciertas reflexiones con las que ilustra los hallazgos de un escritor capaz de observar y tomar ideas de su cotidiano, Linda anota en un pizarrón sus claves para lograr una buena escritura:
1)      La voz artística (la propia voz):
Para Linda uno debe de buscar su voz original, la voz que me hace tener un estilo único. Para ello debo saber cuál es mi género y qué temas son los que deseo explorar. Como ejercicio propone reconocer nuestras películas favoritas y reconocer qué es lo que tienen en común. La voz Woody Allen, por ejemplo está en la comedia psicológica, la de Oliver Stone es una voz de tono político. Hallar una voz propia es la primera clave para encaminarse a la escritura única, original y que no implica seguir alguna fórmula, sino usarla sólo como complemento para desarrollar una idea con tono propio. 
2)      El oficio
Linda habló de forma muy contemplativa sobre el cuidado y la decisión de la estructura, el diálogo, la creación de personajes dimensionales, la acción, la progresión, la integración del tema en la trama. Pero enfatizó en la idea de que el guionista debe convertirse en un pensador visual. ¿Qué se ve, cómo se ve? La imagen como clave de la escritura cinematográfica.
3)      El proceso creativo
Existen 4 periodos del momento creativo que un escritor debe saber reconocer para no entrar en pánico y para prepararse y reconocer y controlar su proceso creativo:
  1. La preparación: ¿cómo encontrar una historia? Linda propone ejercicios: pensar en temas que nos inquieten, en experiencias de vida a resolver, o en experiencias inusuales que puedan arrancar una historia. Pensar, al reconocerlas, si tienen un principio, un desarrollo y un final (las leyes tácitas a cualquier relato). Éste es un tiempo de investigación y observación, tiempo de buscar y absorber información, de conocer todas las variables que van a ser determinantes en una historia (cultura, época, vocabulario, antecedentes, tramas subyacentes, detalles personales, etc.).  Hay que entrenar la imaginación para atrapar las ideas que puedan derivar en buenas historias.
  1. Incubación: Es un momento personal, donde el escritor se ensimisma y sabe cómo hacer que todo el material anterior se cocine. Es el tiempo del inconsciente.
  2. Iluminación: Momento de correr a la computadora y capturar la idea. Desarrollo de la idea.
  3. Verificación: ¿Funciona? Tiempo del feedback, autocrítica y probar con más gente. La verificación final es la de la audiencia.
Es importante que el escritor reconozca su proceso creativo para tener control sobre éste y saber entrenar  la imaginación con los estímulos adecuados.

El tema.
Linda colocó “el tema”, como la idea central de una película, la que dará guía a mi historia. Si uno no puede nombrar el tema, si uno no puede verbalizarlo, significa que no tiene aún una historia. En cuanto puedes verbalizarlo, en cuanto puedes visualizar en una gran palabra el tema de tu historia significa que sabrás elegir que va y qué no, qué deshechas y qué se queda. Teniendo un tema, siempre tendrás un centro que te permitirá seguir en el camino.
Esa gran palabra que será tu tema no puede ser una declaración como decir que tu tema es el “amor”. Tu tema siempre debe de implicar acción.  El tema te lleva a formular una premisa, una tesis que la historia se dedicará a probar en tus tres actos. Por ejemplo, la premisa: cómo la ambición, lleva a la destrucción. En ella están implícitos los tres actos, en tu premisa está implicada una historia con todo y su final. El tema, también debe implicar dos fuerzas en conflicto, en tensión, en lucha. Por ejemplo: tradición vs. renovación; conformismo vs. creatividad, opresión vs. liberación.

Piensa en tu audiencia.
¡Piensa en tu audiencia!, insistía la señora Seger, preocupada porque muchas veces los guionistas nos olvidamos de quién específicamente recibe nuestras historias. La audiencia te puede guiar en tu tema, qué les pasa, qué necesitan, qué les quieres reflejar, cómo se van a identificar. Y nos compartió una reflexión sobre los temas que preocupan en las distintas etapas de vida. Lo que afecta a nuestros personajes, puede venir de sus distintos momentos de vida y la audiencia se debe identificar con ellos:
Bebé: la confianza y la protección. Si no los tuvo, el personaje no podrá relacionarse amorosamente en su etapa adulta, no podrá confiar.  A todos nos preocupa un bebé sin protección. 
Niño: La construcción de la autoestima, la confianza y seguridad en sí mismo. Necesita la aceptación y ser reafirmado. ¿Pertenezco? 
Adolescente (13 a 19): ¿Cómo voy a pertenecer? La lucha de su individualidad con lo que le imponen de fuera, la lucha por distinguirse y sentirse individual. 
Los veinte: Descubrimiento de la intimidad. La lucha también contra el conformismo exterior. 
Los treinta: El éxito.  Hacer algo de uno mismo, llegar a la cumbre, ser alguien. 
Los cuarenta a los cincuenta: El materialismo vs. la espiritualidad. 
Los cincuenta: Mis valores vs. los valores del mundo. Es una confrontación total: ¿hice en mi vida lo que realmente quise, o lo que pude… o lo que pensé que era correcto? Lo hago ahora, o nunca.
Un film se hace en el corte, comenzó diciendo Truby.
El corte es el que salta de una acción a otra; de un personaje a otro. Pensar en cortes, es pensar en la yuxtaposición entre dos escenas, entre dos temas, entre personajes. El 90% del éxito de un film está en la estructura de la trama. Si visualizas la secuencia estructural, estás del otro lado. La premisa es clave para proyectar esta estructura profunda en tu historia y llevarla hacia un género adecuado. La estructura no tiene nada que ver con la técnica en tres actos, esto es el gran mito del guionismo. Una estructura debe de ser orgánica y profunda.
Truby se concentró en explicar brevemente un sistema basado en 7 pasos para el desarrollo de una estructura basada en el arco dramático del personaje, en el concepto de trama y un método de 22 pasos, así como y en una breve reseña sobre su clasificación de los géneros cinematográficos. El tiempo apenas nos permitió echar una ojeada a su fundamentada y sistematizada teoría.

Los 7 pasos de la estructura principal
Siete claves para pensar antes de ponernos a escribir…
1. Debilidad/Necesidad
    Hay que plantear le debilidad del personaje y una necesidad interior que se le revelará a lo largo de la historia. Debemos meter al personaje en un problema. Un problema que debe resolver.
2. El deseo
    Es la meta externa del personaje. Aquello que el personaje quiere alcanzar y que lo lleva a la acción para poder resolver su problema.
3. El oponente
    La persona o aquello que va a obstaculizar la meta de nuestro héroe.
4. Plan
    Estrategias para alcanzar la meta. Pero el oponente es muy fuerte para el héroe. Debe tener un mejor plan.
5. La Batalla
    La gran confrontación con el oponente.
6. La auto-revelación
    Al héroe, después de la batalla, se le revela quién realmente es en lo moral y en lo psicológico.
7. Nuevo equilibrio
    Nuestro héroe se transforma. Puede llegar a un estado de fortalecimiento interior y madurez; o puede llegar a la destrucción y la gran caída. 
“Los pasos para la acción de nuestro héroe rumbo a resolver un problema vital, eso es una historia”, dice Truby.
Estos siete pasos son parte de cualquier historia y depende de cómo los manipulamos convertir nuestra historia en única.

Variaciones de la historia
Truby piensa en tres grandes variaciones de la historia para manipular la estructura. El menciona como bits los puntos clave que le dan sus características de progresión. Aquí los menciono con sus bits:
  1. La mítica: Es circular. El viaje del retorno al hogar. Su estructura tiene siempre constantes: Generalmente el héroe de la estructura mítica tuvo un nacimiento complicado. Hay una dificultad inicial que marca su destino. Un conflicto que arroja al héroe a una necesidad, una búsqueda, una resolución de un conflicto. Se aparece un talismán (un objeto de poder) que cargará en su viaje. Se marca una línea de destino y nuestro héroe emprende un viaje. En éste, se encontrará con diversos oponentes, ajenos a él en un principio, sin embargo conectados por una fuerza mayor. Son historias episódicas. El héroe llegará hasta el infierno y saldrá de él. Habrá una batalla final. Vendrá la autorrevelación. Una revelación que también se hará pública, todos sabrán que él es un rey, tal vez, y nuestro héroe tendrá que tomar responsabilidades y aceptarlas. La visión, la revelación que recibe es cósmica, y es una visión que revela cómo deben de comportarse todos en el futuro. Luego viene el retorno al hogar donde nuestro héroe está profundamente transformado. El retorno implica el renacimiento del héroe.
  2. El cuento de hadas: Se plantean las debilidades del héroe. La necesidad es inmediata. Algo así como… había una vez una mujer que se quería casar. Los personajes son buenos y malos. El deseo es un deseo extremo como… quiero ser la más hermosa, el más valiente. Hay un conflicto en la familia, en lo íntimo. Se involucra siempre la esclavitud, el estar atrapado y los héroes tienen que liberarse. Hay un hada madrina que ayudará al héroe de la historia. Hay un reino. El final siempre es exitoso. Se usa mucho para las historias románticas.
  3. Drama: Hay un acontecimiento del pasado que atormenta al héroe (lo que Jung llamaría una sombra). El deseo de resolverlo es inminente. Pero no hay viaje físico. El héroe habita en una olla a presión, está entre paredes hasta que explota. Es un conflicto moral. El oponente es siempre íntimo y muy poderoso. La batalla será con su ponente más íntimo (su madre, su padre, etc.) .Y habrá una decisión moral que el héroe tendrá que tomar. 
Los personajes definen la historia.
Dice Truby (igual que lo dijo Cortázar), que hay que ver el final de la historia para poder comenzar a escribir. Para Truby se trata de definir la auto-revelación, el cambio de nuestro personaje, para de ahí lograr construir desde atrás. El marco de la historia radica en llenar la línea del inicio hasta el final con sus respectivos bits. El arco del personaje, el ver cómo va transformándose nuestro héroe, es lo que llenará de bits y contenido nuestra historia.
El arco del personaje arranca desde el inicio de la historia cuando a nuestro héroe se le presenta un reto que cuestiona sus valores.
Los retos van creciendo en la medida en que el héroe se va resistiendo hasta llegar a la transformación y ser inducido a tomar una nueva acción moral.  
Hay que saber cuáles son las creencias de nuestro personaje, a ellas ponerles retos, ponerlo a prueba hasta verlo cambiar. El oponente debe estar construido de igual manera, para poner en conflicto ambos valores. 

La red de personajes.
Hay que crear una red de personajes, compararlos con los demás y crear una variedad complementaria. Cada uno tendrá su rol, su arquetipo, su debilidad, su arco dramático, su necesidad psicológica y moral, su deseo y sus valores.

Trama
Trama no significa lo que sigue después, esto es basura, dice Truby. La trama es la coreografía entre el héroe y sus oponentes. La trama es un entretejido entre el héroe y el ataque de los oponentes. Para ello, Truby generó un método de 22 pasos de la trama que no parece tanto una fórmula, sino un análisis de cómo una trama puede generar suspenso y un camino del héroe que verdaderamente lo ponga a prueba. 
       Así que Truby considera agudamente que la trama se construye desde el oponente. El oponente es quien dará las sorpresas y justo esto es la trama, las sorpresas. Así que concluye, para crear la trama hay que concentrarse en el oponente principal.

Crear jerarquía de oponentes
Al oponente principal, para generar mayor expectativa, interés, revelación, hay que esconderlo al héroe y al público. El héroe va contra el oponente desde el inicio, pero es un oponente menor (oponentes secundarios). Conforme se intensifica el conflicto vienen los ataques del oponente oculto. Es un proceso donde el héroe irá descubriendo al oponente principal.

Secuencia de eventos
La relación entre el héroe, su deseo y el oponente genera distintas formas de interconexión. Truby ejemplificaba el movimiento orgánico de las historias con líneas. Existen historias donde el héroe, por ejemplo, va en una dirección lineal hacia su único deseo intenso y claro, la línea es recta y en forma de flecha.
Otras, como la Odisea, con una estructura mítica, donde llegan varios oponentes, la línea de la historia, de la trayectoria del héroe no es tan recta, ni tan clara, la línea tiene forma de serpiente.
Un thriller por ejemplo tiene la forma de una espiral, donde el oponente está oculto y la historia se mueve de forma circular de afuera hacia dentro con distintas capas que van hacia la profundidad hasta descubrir al oponente, en el trayecto hay sorpresas y revelaciones... 
Truby hizo otros interesantes trazos que ya no alcanzó a explicar. Lástima, la figuras se iban complejizando. Sin embargo, le pareció más importante dedicar el tiempo previsto a su clasificación de géneros.

Los géneros cinematográficos
La línea de deseo de nuestro personaje nos ayuda a definir el género de nuestra historia o viceversa. Y al definir el género sabemos cuál es el tono de la historia, sabemos cómo llegar a tocar esos bits que le darán progresión y trama a nuestro relato. Es importante señalar que no existe un género absoluto, siempre son híbridos.  Generalmente existe un género principal que establece la línea del deseo de nuestro héroe y existen géneros técnicos que nos ayudan a encontrar los bits de nuestra trama. La idea de un género es siempre trascenderlo. Truby identifica 12 géneros y plantea una pregunta clave para identificar el género principal y diferenciarlo de los que serían nuestros géneros técnicos.
  1. Horror: ¿Qué es humano y qué es lo no humano? Tememos que lo no humano entre a nuestro mundo, peor aún, que esté en nuestro interior. Hay un pecado del pasado que nunca se ha resarcido. El héroe de nuestra historia tiene el potencial de repetir el crimen. Hay un giro estructural a la mitad en el que el monstruo se convierte en el héroe y el humano en el monstruo, pues éste resulta más humano.
  2. Fantasía: ¿Cómo puedo vivir con fuerza y en libertad? El mundo es ordinario, hay un portal o pasadizo que el héroe cruza. El héroe en lo ordinario es débil. El mundo de fantasía resuelve su debilidad y éste regresa al mundo ordinario resuelto y encuentra ahora en éste enormes posibilidades. 
  3. Ciencia Ficción: ¿Cómo crear un mundo mejor? Existe una premisa filosófica y social en la ficción. La ciencia ficción no trata de predecir el futuro. El mundo de la ciencia ficción es reconocible, se parece al nuestro. Creamos tecnología pero ésta también nos crea. Hay una historia mítica un renacer del héroe. Y tiene también elementos del género de horror.
  4. Mítico: ¿Cuál es tu destino? El héroe siempre emprende un viaje que finalmente es un viaje hacia su interior. 
  5. Acción: ¿Pelea o huida? El héroe se enfrasca en un combate. Es cuestión de honor. El héroe es puesto a prueba constante y hay un énfasis en su capacidad para improvisar y salir airoso de los peligros.
  6. Detective: ¿Cuál es la verdad, quién es culpable y quién inocente? La estructura es clave de la trama. Hay dos modos de abordarlo: un embudo a la inversa donde una corrupción pequeña nos lleva a descubrir una mayor, vamos de poco a mucho hasta el límite; o  comenzar desde el final de la gran corrupción y de ahí se jala la puntita del hilo que nos lleva a localizar dónde comenzó todo. Este género es el que más revelaciones demanda.
  7. Crimen: ¿Quién puede vivir por encima de la ley? Se trata de cachar al criminal. Es una batalla entre personajes de pesos completos, el mejor policía contra el mejor criminal. La mayor revelación está en la última escena.
  8. Thriller (o novela de suspenso): ¿Se justifica tu sospecha? El héroe investiga al mismo tiempo que escapa. Éste se convierte en la víctima y está en gran peligro. El héroe tiene una necesidad personal que al mismo tiempo se resuelve cuando se resuelve el crimen. Cuando hay una relación amorosa en la trama el personaje involucrado en la relación amorosa usualmente cree en el amor total  a riesgo de perder la vida.
  9. Memoria (o La Historia Verdadera): ¿Qué hace mi vida única y valiosa? Son historias basadas en eventos reales, en biografías, que generalmente comienzan en la batalla final, o tiempo después, y recapitula los hechos a través de un recuerdo de alguien con libertad para organizar esos eventos. El recurso de la voz en off es muy utilizado.
  10. Amor: ¿Qué tanto puedes amar? Dos personajes se aman a pesar de toda la oposición o diferencias entre ellos. O dos personajes tienen una debilidad desde el inicio que sólo la otra persona puede llenar.
  11. Obra maestra: ¿Cómo puedes vivir sin convertirte en un esclavo del sistema? Se trata de encontrar una realidad más profunda. ¿Qué sistema voy a representar en esta historia y quiénes serán los personajes que personifiquen al sistema? Este género, para Truby resulta cuando el escritor logra dimensionar su historia hasta lograr una estructura original, que aún basándose en un género convencional, logre una metáfora y una crítica al sistema de alcances universales (American Beauty, El padrino, etc.).
  12. Comedia: ¿Mentimos o nos mostramos tal cual somos? El héroe busca alcanzar el éxito o el amor con resultados ridículos. No se trata de ir tras la broma, el héroe tiene una trayectoria igual que en el drama. La trama derriba al personaje constantemente. Se trata de mostrar las máscaras, las fachadas que nos ponemos para intentar ser más exitosos. John Truby parecía entusiasmado en exponer una clasificación en los estilos de comedia. Pero, el tiempo apremiaba…
Aquí terminó la intervención de John Truby. Claro, antes nos mostró un poco de un software de su invención que permite crear plantillas y fichas para visualizar la historia y no perder los elementos clave de su estructura. Sin embargo, es en su libro Anatomía del guión donde detalla sus teorías sobre el universo de un relato, donde estudia y profundiza más en la alquimia que da vida a una historia, que los esquemas planteados por Syd Field, consultor que le siguió en el podio y del que hablaré en la siguiente entrega…
CONTINUARÁ…

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Wow, muchas gracias! Moría por ir.

Anónimo dijo...

:o continuará...

Lola Lagata dijo...

y me pregunto...cómo es que el script consulting es el "nuevo" oficio de elevado prestigio en la industria cinematográfica, cuando, a mi gusto, cada vez hay menos historias interesantes en Hollywood. Entiendo y me gusta pensar que el cine, el lenguaje cinematográfico muta, cambia porque se mueve, que quizá esté en una etapa transitiva pero las buenas historias cada vez son menos, justo porque todas son fórmulas donde sobreabunda la intención de "dominar al mundo"...si ya lo habían dicho Pinky y Cerebro, bro, bro bro. http://www.youtube.com/watch?v=kMDSFq6Ay_g

Como siempre, se agradece este espacio. Mucho.

El inquilino dijo...

Hahahah, Lola, eres genial. Cómo me he reído con eso de Mr. Spielberg presenta.. Pues sí, métodos, claves, manuales, chou bisnes en México traído por los jesuitas y su universidad de pago y buen pago, jeje. ¿Por qué cada día hay peores pelis en Jolibú? Porque todo son lucecitas, efectos especiales, remakes, y 3d. La clave está en nosotros y nuestra nueva interpretación de las cosas, no en la suya, que está de más decir que pasa por la peor época en toda su historia. Aún así, sería osado decir que en la industria del gringo ya no hay historias. Las hay, pero cada vez escasean más. Incluso en la esfera Cohen... o era Cogen, :P

Anónimo dijo...

Todo parece indicar que estas cumbres confirman la necesidad mítica de los guionistas de obtener calor humano, algo de aliento, el autor. ¿Qué es un autor? Se preguntan por allí. Entre guionistas no es lo que está plasmado en sus libros, sino el que cobra por repetir lo que está en sus libros muy bien planteado. Y lo repite de afán. Y lo repite como diciendo si están aquí es porque no me entendieron y quieren escuchar lo que supuestamente no dije allí. Pero la verdad es que todo está allí. Es más, allí podrán regresar cuando quiera. No como estas charlas, donde sólo quedará el tenue recuerdo de que nos vimos (me vieron?) a los ojos hablando de la misma gata pero despelucada.

El inquilino dijo...

Interesante reflexión, la soledad del guionista, que es cierta y totalmente palpable, soledad compartida no ya con una mascota perruna o gatuna sino con otras tantas soledades (cientos de ellas) que buscan la gran compañía del público, que en cine se presupone milenario y por qué no, mileurista. :) Pero les falta algo: películas, películas, películas.. No será que el guionista que no escribe se asume como consultor por cobardía o necesidad? o sencillamente "no escribo, soy maestro". Podríamos seguir deshilando a estos personajes. Ya quiero leer la entrega 2!

Unknown dijo...

Sí, se espera la segunda entrada y especialmente hay que agradecer a la autora porque realiza un gran esfuerzo. No creo que sea fácil ser consultor y mucho menos tener prestigio con esa profesión. Creo que la su visita es importante y realmente lo que opera en tanto guionista mochandose la lanita que nos hace falta para verlos es que te hacen mover el coco. Repensar las cosas, actividad de suma importancia en nuestro oficio. Reconfirmar, redescubrir, tratar de reescribir gracias a que estos gurú te redicen echele pues pa la cama o el escritorio o la compu. Lo malo es lo costoso, lo malo es que hace emerger nuestra inutilidad de generar este tipo de motores de manera autónoma. Además hay un peligro en estos encuentros, que dos guionistas se encuentren y después les de por reproducirse.

El inquilino dijo...

Jajaja.. Sí, es peligroso que los y las guionistas se reproduzcan, se repliquen y trabajen juntos, odiándose y jalándose de los pelos, por su puesto. ¿Qué sería del mundo si eso sucediera? Horror, acabarían con la tinta y el papel del mundo, implementarían la tan temida dictadura y bien dura del guionista, ¡se acabarían los efectos especiales y psicotropías varias en el mundo! Los gurús edificarían sus propias iglesias de escritura de guión, Jesús sería presentado con cara de nerd, con gafas de pasta y una playera de los Warriors o de ET, o aún peor, de los Cazafantasmas! El pop reinaría por doquier y los niños jugarían con espadas laser a trinchar a sus papás! No, mejor mantengamos a los guionistas atados como perros, que si no se nos desmadran y llega el caos.

Itzel Enciso dijo...

Y aunque hayan discriminado que era un artículo exclusivo para guionistas. lo he leído y muchas de esas cosas, sin ser guionista, se aplican en otras cosas que me interesan: la dirección de actores e incluso en la creación del personaje. Claro, cada actor es diferente, así que más vale de lo conocido personalizar según tu caso (lo que hice con el artículo. El conocimiento y reinvenciones están sin límites, sin fórmulas y reglas que sean exentas a romperse)
Saludos Inquilino, seguimos leyendo a tus invitados y próximas publicadiones

Anónimo dijo...

Hola. Hay mas reseña de la cumbre de guinistas? Me fue de gran utilidad. Quisiera conocer mas. Saludos

El inquilino dijo...

Claro que la habrá, en breve, cuenta con ella. Nomás que se aligere de chamba nuestra inquilino-repotera!

Anónimo dijo...

Gracias!

Estoy leyendo el libro de Truby y hay cosas que no me gustan, sobretodo como describe, pero sus ideas son muy interesante,s la verdad; te hace plantearte muchisimas preguntas y la historia se va creando a medida que las contestas.

Syd nunca me cayó bien, pero ojearlo de vez en cuando también es interesante.

Linda me agrada también mucho.

Un saludo

Licencia Creative Commons
el inquilino guionista se encuentra bajo una LicenciaCreative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 3.0 Unported.