¿Cómo te inicias en la escritura?
Adriana Pelusi: No estoy muy
segura. Porque no soy de las que escribía desde que estaba chiquita, ni llevaba
mi diario, ni montaba obras de teatro en el desván al estilo Mujercitas.
Cuando
estaba en la prepa decidí que quería estudiar cine, en general. Ya en la
Universidad decidí que quería estudiar guión, en específico. Y entonces se me
metió la idea de estudiar en el CCC. Pero no sabía si esto de escribir era algo que iba a poder
hacer. Cuando me aceptaron en el CCC empecé a escribir realmente y pues no era
tan mala así que le seguí.
¿Y en el fútbol?
Suena a que juego fútbol, pero no,
soy una simple aficionada. El Cruz Azul me gusta desde que estaba chiquita. No sé por qué me entró el
amor por este equipo en específico porque crecí en una casa de chivas y
americanistas. Pero, así es el amor, inexplicable. Al principio veía el fútbol
porque con dos hermanos mayores lo que predominaba en la televisión de la casa
eran los deportes. Luego le agarré más gusto yo que mis hermanos. A lo mejor lo
de escribir y lo de irle al Cruz Azul están relacionados y lo que pasa es que
me gustan las causas imposibles.
Si usáramos un símil entre el fútbol y la
escritura, ¿cuál sería?
Lo más obvio, supongo, es que los dos se basan en
la imaginación. Aunque muchas otras cosas también se basan en eso. Pero bueno, tanto el que escribe como el futbolista
parten de la nada, de una situación en blanco y a partir de ahí van articulando
ideas para crear algo que está en su cabeza. Y en los dos casos confías en
que lo que vas a crear resulte como lo piensas. Pero los futbolistas tienen
segundos para hacerlo y no pueden corregir.
En tu obra de teatro Vacas, José es el único
personaje masculino y su monólogo parte de una experiencia con el fútbol, ¿es
el fútbol propio del género masculino? ¿Culturalmente cómo ves el fútbol?
Pues sí, el
fútbol es propio del género masculino. A muchas mujeres les gusta. Muchísimas
mujeres lo juegan. Pero sigue siendo "el juego del hombre" (y en esa
expresión no usan la palabra con la connotación de ser racional, se refieren a
los hombres, hombres). Lo de que el personaje de José hable de fútbol no es porque
sea el único chico en la obra. Es más porque yo siempre he creído que hay una
relación entre el fútbol y Dios y José es el personaje más religioso. Así que
me gustó la idea de plantear que había llegado a su fe a través del fútbol.
Siendo más quisquillosa: Escritora y de provincia
(aunque naciste en D.F. sé te consideras regia) ¿Vives misoginia en tu ámbito
profesional?
No. Sé que
suena a que vivo en la Isla de la Fantasía, pero nunca he tenido una mala experiencia como guionista por
ser mujer. He tenido malas experiencias por ser guionista, en general, como
todos los que le entran a este asunto. Sí hay muchos escritores misóginos, pero
supongo que también hay abogados misóginos, maestros misóginos, bibliotecarios
misóginos. No creo que sea algo especialmente relacionado con lo que yo hago.
En Vacas también se plantea la complicada relación
entre dos mujeres, dos hermanas. ¿Tienes hermanas, Adriana? ¿Qué es la
feminidad para ti y cómo la ves desde un ámbito social?
Yo no tengo
hermanas. Por eso tenía curiosidad de escribir sobre lo que sería tener una. Me
gustan mucho, en general, las historias sobre hermanas. En especial las
historias como la de ¿Qué le pasó a Baby Jane? o Cadenas de Amargura donde las hermanas están diseñadas para atormentarse las unas a
las otras. Pero también quería hablar sobre la manera en que las niñas son
educadas, en particular en Monterrey y en particular en los colegios de monjas.
Esto de "Si regalas la leche, no
compran la vaca" era algo que me decían a mí de chiquita en la
escuela. Había una necesidad de clasificar a las chavitas en las güilas y las
bien portadas. Y cuando creces con eso creces con una idea de la feminidad muy
extraña. Creces creyendo que tu valor como persona depende de tu virginidad,
como en obra del siglo de oro.
Con esta
obra ¿Crees que te colocas en el humor blanco? ¿Cómo calificarías la comedia en
Vacas, por ejemplo?
No sé si es humor blanco. Creo que es un poquito cruel
para ser blanco. Supongo, usando esto de los colores, que es un poquito rosa
(en el sentido de que habla de cosas en apariencia superficiales) y un poquito
negro. El uso de referencias televisivas/cinematográficas es algo particular
del personaje de Lourdes, la hermana supuestamente mala. Es parte de la imagen
artificial que ella misma se ha querido crear. Evade hablar de los temas
importantes, prefiere discutir El bebé de Rosemary y los reality shows de mamás que no
sabían que estaban embarazadas. También por eso miente tanto.
De la
escritura de Vacas a la producción de la misma, ¿cómo fue ese proceso? ¿Por qué
decides entrar como productora?
Entré como productora porque si no nadie más la
iba a hacer. Cuando terminé de escribir el texto se lo mandé a mi amigo Carlos
Quintanilla, el que la dirige. Y los dos decidimos en una taquería de
Insurgentes que queríamos montarla nosotros, por nuestra cuenta. El plan era
hacer lo que hace todo el mundo: esperar a que empezara la temporada de apoyos
y becas (¡FONCA! ¡El 226! ¡La fundación BBVA!). Pero entonces, milagrosamente,
me dieron el premio Emilio Carballido y como el premio, aparte de la gloria,
venía con un dinerito decidí invertirlo por completo en la obra. Y pues ya que
iba a entrar como inversionista mayoritaria, pues decidí asumir, junto con
Carlos, las funciones de producción. Así pasara lo que pasara no podíamos
echarle la culpa a alguien más, lo que está en escena es nuestra
responsabilidad y todas las decisiones las tomamos nosotros. No lo habíamos hecho
antes, pero echando a perder se aprende.
¿Cómo
fue la selección de los actores? ¿Cómo es tu relación con las televisoras? T.V.
azteca específicamente...
Cuando montar la obra se volvió una posibilidad,
por lo del premio y porque nos seleccionaron en La Gruta, pensamos en actores
con los que nos gustaría trabajar porque ya los habíamos visto en otras cosas.
Era como nuestra lista de ensueño. Fue casualidad que todos fueran egresados de
la escuela de actuación de Azteca, pero también ha sido bueno porque como el
director también estudió ahí comparten un mismo lenguaje y una manera de hacer
las cosas. Todos los actores que queríamos en un principio nos dijeron que sí.
Luego, una de las chicas no pudo por cuestiones de trabajo y la siguiente
opción en nuestra lista también nos dijo que sí luego, luego.
De
escribir teatro a producirlo ¿qué panorama te brinda?
Que me doy cuenta de todas las trabas y
complicaciones que le puse a la producción desde el texto. Como el hecho de que
salto de escenas en que un personaje está embarazado de seis meses a otras en
las que no está embarazado a otras en que está embarazado de nueve. Sin pensar
en cómo le iban a hacer para resolverlo. Además, como el equipo de producción
somos el director, su asistente y yo, he tenido que ir a todas las funciones y
eso ha implicado que a estas alturas lo
que menos me importa de la obra es mi texto. Me importa que todo en la
escenografía esté donde deba estar, que la ropa esté planchada, que los actores
hayan entregado sus recibos, que se hayan vendido suficientes boletos, que la
actriz no se caiga cuando se sube a la mesa…
Qué
prefieres ¿escritora o productora?
¡Escritora! La producción implica muchas
habilidades logísticas, sociales, administrativas que todavía no desarrollo.
Además, creo que para hacerlo correctamente, o para tener éxito, te tienes que
volver un poco malvado. Los escritores
podemos ser buenos y amables y además podemos echarle la culpa de todos
nuestros males a los productores. Es mucho mejor.
¿No hay
escritores malvados? ¿Qué les dices a los guionistas que inician? ¿Cuándo un
guionista inicia su carrera?
Creo que los guionistas somos en general buenas
personas (desquiciadas, egocéntricas, incapaces de pagar los impuestos a
tiempo, malas para administrar el dinero, de moral distraída, sangronas, pero
buenas). A un guionista que empieza su
carrera le digo lo mismo que le digo a un nuevo aficionado del Cruz Azul: si lo
que quieres son triunfos, premios y reconocimientos la vas a pasar muy mal,
pero si decides entrarle a esto porque te gusta el proceso de la escritura por
la escritura misma, es muy bonito y vale la pena. El chiste, tanto para el guionista como para el aficionado del Cruz
Azul, es no perder la fe.
¿Qué
estás escribiendo ahorita?
Ahorita estoy desarrollando contenidos para una
productora, Los Güeros Films.
Escribí para ellos un guión de largo y hemos estado trabajando en proyectos de
series. También estoy escribiendo una telenovela para Tv Azteca, por eso, si se
fijan, no los critiqué mucho. Y estoy en muchas otras cosas pequeñitas, terminé
de escribir una serie web, estoy tratando de terminar un guión con el que llevo
años y en el que a lo mejor ya tendría que desistir, quiero empezar otra obra
de teatro. Todos estos proyectos pueden salir en un futuro cercano, salir en
muchos años o no salir nunca. Así pasa.
¿Cómo
ves, qué te parece El Inquilino Guionista?
Me gusta mucho el Inquilino Guionista porque es un
espacio para hablar sobre el guión, para discutir ideas y para enterarte de
cosas. Me gusta en especial que últimamente ha habido un interés en resolver
dudas sobre guión. Creo que eso es una
idea muy mona para seguirla desarrollando, guionistas resolviendo las dudas de
otros guionistas.
VACAS de Adriana Pelusi se presenta los lunes a las
20:30 hrs. en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico. Dirección de
Carlos Quintanilla, actuación de Marimar Vega, Patricia Garza y Francisco
Cardozo.
La entrevista ha sido realizada
por la guionista Talía García Vergara para el inquilino guionista. :D
No hay comentarios:
Publicar un comentario